Tuesday, November 25, 2014
Arte de Gustavo Paffaro Por Francisco Puñal Suárez
Con el
título de Paffaro um exagero de arte, el 41 Salón de Humor
Internacional de Piracicaba organiza una muestra personal del caricaturista
brasileño Luiz Gustavo Paffaro, uno de los artistas más creativos de su
generación.
Entre las exposiciones
paralelas del 41 Salón de Humor de Piracicaba, uno de los más importantes de
Brasil, que se inaugura el 23 de agosto con el anuncio de los dibujos premiados
en competencia, está la muestra antológica del talentoso diseñador
brasileño Luiz Gustavo Paffaro, cuyas caricaturas personales causan admiración en
todo el mundo.
Más allá del
reconocimiento a mi trabajo –dice Paffaro- tener una muestra exclusiva en
este Salón Internacional de Piracicaba, evento que tanto respeto, y que ya ha
contado con la presencia de innumerables artistas renombrados como Ziraldo,
Luis Fernando Veríssimo, Millor, Zélio, Paulo y Chico Caruso, Angeli, entre
tantos otros, es un gran honor y la realización de un sueño.
A Paffaro siempre le llamó la
atención el diseño humorístico, y por ello contó con buenos maestros de dibujo
y pintura en su formación, que continuó con estudios superiores de publicidad y
diseño, en la Universidad Paulista. Con sus 35 años ya tiene un amplio
curriculum, y diversos medios de su país como Folha de S. Paulo, Veja,
Almanaque do Fantástico, Super- Interessante, Mundo Estranho, Sapiens, Você
S/A, Playboy, Bizz, Placar, Pequenas Empresas & Grandes Negócios, Alfa,
Aventuras na História, Continente, MAD (capa), entre otros, han publicado sus
obras.
En el proceso de creación para
hacer una caricatura personal –expresa- , mi primer paso es tener
una buena referencia visual de la persona que voy a dibujar, para ello realizo
una exhaustiva investigación de su biografía, su comportamiento social,
gestos, escucho sus palabras, etc. Yo, particularmente, me gusta mucho
trabajar con buenas fotos, de esas que tengan detalles de luces y
sombras. También, ver sus videos.
El segundo paso –afirma-
es hacer el esbozo pensando ya en la “distorsión” o
“recreación” de su rostro, que es el proceso más importante de todos.
Necesito tranquilidad en mi trabajo, que no haya interrupciones y me
gusta escuchar música de jazz. Las personas son diferentes unas de otras no
solamente en su aspecto físico, sino también en su carácter, su personalidad,
por eso tal vez me interesó tanto este arte, ya que tengo un desafío
nuevo cada vez que hago una caricatura.
La evolución de un artista
–puntualiza Paffaro- consiste en la capacitación, el estudio y la observación,
todos en la misma proporción, nadie nace listo y el aprendizaje es constante
durante toda la vida. Mi consejo para aquellos que están comenzando es nunca
darse por vencido, entrenar duro y apreciar la obra de los grandes
maestros de la pintura.
El dibujo es un lenguaje
universal que puede ser entendido por todo el mundo. El arte ayuda a las
personas a enfrentar los problemas cotidianos y los defectos, y también a
encontrar la solución. Es muy importante que la gente sea feliz – finaliza.