Friday, January 08, 2016
Cartoonismo, uma profissão de risco? - (parte da exposição sobre Charlie Hebdo na Bedeteca da Amadora
“Aquilo de que me acusam não
está
no desenho, mas na vossa
consciência.”
Philipon (séc. XIX)
Aconselha a ética da
democracia que a minha liberdade se suspenda onde começa a dos outros, assim
como a dos outros onde começa a minha. O que está em jogo na sociedade
contemporânea não é o conceito de tolerância ou intolerância, mas de cultura
educacional onde o “sentido de humor” se impõe, ou não, como aceitação do
pluralismo, do direito à diversidade de opiniões.
O direito à indignação é
outra das vertentes da democracia, como emoção pessoal, mas não de reacção
radical, porque segundo a argumentação de Carlos Drumond: “Não me contradigas, sabes muito
bem que nenhum de nós tem razão.”
Haverá temas tabus,
elementos sagrados e intocáveis ao humor, como as religiões, elementos da
soberania, políticos, dirigentes tribais, desportivos e espirituais? Não,
quando esses falsos ícones do poder servem para esconder radicalismos,
fundamentalismos, corrupção, abusos de poder espiritual, governativo, económico
ou judicial. Como refere o equatoriano Bonil, que no último ano sentiu na pele
várias acções de intimidação: “É importante não ceder ao medo. Humor e
sátira geralmente incomodam aqueles que têm um grande EGO. É por isso que eu
digo que o cartoonista é a pomba que mancha as estátuas dos arrogantes, dos que
se acham imortais e sagrados.”
Viveremos um choque de
culturas, entre uma que dá prioridade à imagem, ao direito de contestação, e
outra que é iconoclasta e submissa? Entre culturas democráticas e ditatoriais?
Ou não há choque nenhum, apenas prepotência de quem quer manter-se no poder
acima de qualquer justiça?
Esta é uma breve resenha de
cartoonistas que, com maior ou menor gravidade sofreram, nos últimos dez anos,
opressão judicial, religiosa e política, Ficam de fora muitos outros que
conheceram apenas a censura, o despedimento (Rayma Supremi – Venezuela, Rui
Pimentel – Portugal), a proibição de publicar no seu país (Mikhail Zlatkovsky –
Russia), os que tem de viver sob protecção policial (Lars Vilks – Suécia, Molly
Norris – USA, Kurt Westergaard – Dinamarca) …
Estes são os artistas que têm
sofrido a opressão dos poderes humanos…
Osvaldo Macedo de Sousa
(Humorgrafe)
Charlie Hebdo na Bedeteca da Amadora
One year after Charlie by Tjeerd Royaards
Charlie Hebdo por Michael Kountouris
Charlie Hebdo por Damien Glez
¿Qué fue de ‘Charlie Hebdo’?
Un año después del atentado
que logró diezmar su redacción,Charlie
Hebdo ha dejado de
ser aquel pequeño semanario satírico de otra época, a ratos malquerido y algo
pasado de moda, para convertirse en un icono del combate por la libertad de
expresión y contra el fundamentalismo. Hace doce meses estuvo a punto de echar
el cierre, pero hoy nada en la abundancia, gracias a sus ventas millonarias y a
las generosas donaciones de las que ha sido beneficiario. Pese a todo, su
futuro sigue pareciendo incierto, a causa de las luchas intestinas por el
control de la revista y las dificultades para reinventar la publicación con un
nuevo equipo, sin contar con la carga psicológica derivada de los atentados de
enero de 2015.
Hace unos meses, el redactor
Patrick Pelloux, superviviente de la masacre, acudió a ver un documental sobre
François Cavanna, fundador del semanario en 1969. Salió del cine con una
convicción: “El diario consistía en una banda de tipos reunidos en un bar, que
bebían copas mientras dibujaban. Hemos perdido eso. Ahora, cuando uno se ríe en
la redacción, se siente culpable”. Poco después, Pelloux decidía abandonar la
revista. Lo mismo acababa de hacer un histórico del equipo, el dibujante Luz,
que firmó la portada del primer Charlie Hebdo publicado después
del atentado, aquel número especial “de los supervivientes” que logró
vender 7,5 millones de ejemplares alrededor del mundo. Pelloux
justificó su salida por la extenuación provocada por su tratamiento “a cargo de
tres psiquiatras distintos”. Luz se dijo harto de dibujar a Mahoma y apuntó a
“problemas de inspiración”.
Pero ambos obviaban otro tipo de
problemas, relativos a la batalla que se ha librado en el interior de la
revista en los últimos meses. Ya en marzo pasado, 15 miembros de la redacción
—entre ellos, Pelloux y Luz— firmaron una tribuna en Le
Monde donde
denunciaban el funcionamiento “opaco” de la revista y exigían que se
constituyera en una sociedad cooperativa, en la que los integrantes del equipo
se repartieran las acciones a partes iguales. “Rechazamos que un puñado de
individuos tome el control, ya sea total o parcial, con un menosprecio absoluto
por quienes lo fabrican y lo apoyan”, dijeron. En la actualidad, la revista es
propiedad del nuevo director, Riss (70%) y del director financiero, Éric
Portheault (30%). Supervivientes del atentado, ambos se niegan a crear esa
cooperativa, pero se han comprometido a reinvertir el total las ganancias de
este año en la propia revista.
El título de aquella violenta
tribuna sigue planeando sobre el futuro de la revista: “¿Cómo escapar al veneno
de los millones?”. A los beneficios registrados por sus impresionantes ventas,
que hoy se sitúan en unos 100.000 ejemplares semanales tras haber bordeado los
200.000 hasta el verano (antes de la tragedia, no eran más de 30.000), se les
suman 4,3 millones de euros procedentes de 36.000 donaciones particulares
llegadas de 84 países distintos, además de un millón de euros desbloqueado por
el Ministerio francés de Cultura. Además, Charlie Hebdo contaría hoy con unos 200.000
suscriptores. Antes del atentado no eran más de 10.000.
“En total, el diario sumaría entre
20 y 28 millones de euros”, estima Denis Robert, periodista de investigación
que destapó el caso Clearstream. Ahora
publica Mohicans, un volumen sobre el
pasado y el presente de Charlie Hebdo, en el que
examina cómo el ideal de sus fundadores ha terminado convertido “en marca
comercial”. “Pese a todo ese dinero, el futuro de Charlie
Hebdo sigue siendo
frágil. Sus responsables tienen que entender que ese dinero no les pertenece.
Deben crear una revista abierta y generosa, pero están haciendo lo contrario.
La dirección y el equipo no se dirigen la palabra. De seguir así, terminarán
por desaparecer”, opina Robert. Pese a sus reproches, el autor sigue comprando
la revista cada semana: “Más vale un malCharlie
Hebdo que ninguno”.
Por su parte, el cineasta Emmanuel
Leconte acaba de estrenar en Francia L’humour à mort, un
documental en el que los supervivientes explican cómo han sobrevivido al año
trascurrido desde aquel 7 de enero. “La gran manifestación ciudadana del 11 de
enero en defensa de la libertad de expresión les impulsó a seguir. Por primera
vez, se dieron cuenta de que no estaban solos. Pero luego vino el descenso a
los infiernos”, relata Leconte, aludiendo a quienes se negaron a proclamar
aquello de Je suis Charlie. “El Papa
Francisco dijo que la fe no podía ser objeto de burla, algunos
escritores del PEN Club se opusieron a concederles un premio y el demógrafo Emmanuel Todd firmó un
libro que trataba a sus defensores como católicos zombis. Para el equipo, el shockpostraumático
ha sido difícil de superar. Llevan muchos meses durmiendo mal, no tienen vida
propia y se sienten al borde del ataque de nervios”, afirma Leconte.
Este
miércoles ha llegado a los kioscos un número especial de 32 páginas y una
tirada de un millón de ejemplares, con dibujos de los ilustradores fallecidos,
como Charb, Honoré, Cabu, Wolinski o Tignous, y mensajes de apoyo de
personalidades como Juliette Binoche, Charlotte Gainsbourg, Isabelle Adjani o
la ministra de Cultura, Fleur Pellerin.
En su
editorial, Riss sostiene que el futuro de la revista no corre peligro. “Nunca
hemos tenido tantas ganas de romper la cara a los que soñaron con nuestra
desaparición”, escribe el director. “No serán unos capullos encapuchados los
que echen por tierra el trabajo de nuestras vidas y los momentos formidables
que vivimos con los que murieron. No serán ellos los que vean morir a Charlie. Es Charlie el que los verá morir”.
Además,
Francia dedicará esta semana varios homenajes a las víctimas. Tras conceder la
Legión de Honor de forma póstuma a los dibujantes y periodistas fallecidos,
distintas placas conmemorativas fueron destapadas este martes en varios puntos
de París. El próximo domingo, una ceremonia en su memoria ha sido convocada en
la Plaza de la República. La alcaldesa de París, Anne Hidalgo, plantará un
simbólico “árbol del recuerdo” en recuerdo de las víctimas.
Coco: “Nos reímos incluso de la muerte”
http://internacional.elpais.com/internacional/2016/01/04/actualidad/1451936421_382259.html
“Solo se trata la blasfemia si es necesaria, si está
justificada”, explica la dibujante
Un año después del atentado contra la revista satírica Charlie Hebdo,Corinne Rey, Coco, sigue moviéndose por París con escolta y acude
a trabajar a la revista a una dirección que, por seguridad, es secreta. Coco
fue la que, bajo amenaza, tuvo que abrir la puerta de la redacción de la
publicación a los hermanos Chérif y
Said Kouachi,que en nombre de Alá mataron a 12 personas, la mayoría
de ellas compañeros de la revista, muchos, dibujantes tan afamados como Stéphane
Charbonnier (Charb), Jean Cabut (Cabu), Georges Wolinski o Bernard Verlhac
(Tignous). Coco nunca ha querido rememorar públicamente aquellos momentos y se
queja de la falta de pudor de los medios a la hora de intentar escarbar en
sentimientos y detalles escabrosos de la matanza. Tiene 33 años y espera poder
pasar página ayudándose del primer aniversario de la tragedia que conmocionó a
toda Francia.
Pregunta. Ha pasado un año del atentado de Charlie Hebdo.¿Cómo va
usted?
MÁS INFORMACIÓN
Respuesta. Mejor. El tiempo pasa, lo que es importante
cuando se vive algo tan duro y excepcional. Tras los atentados, me resultó
evidente volver enseguida a dibujar. Lo necesitaba. Tuve el inmenso privilegio
de trabajar con Cabu, Charb, Luz y los demás. Aprendí todo de ellos. Tras lo
ocurrido, me dije que debía seguir por ellos. Creo que ellos habrían hecho lo
mismo. Que la revista continuara era, además, la única respuesta posible. No
podía morir por culpa de esos imbéciles.
P. ¿Ha cambiado el humor? ¿Se ríen ustedes de la
misma manera que antes?
R. Nos seguimos riendo de todo porque es el
sentido último de nuestro oficio. Es la actualidad la que nos dicta los temas y
buscamos la reflexión, las preguntas y dar nuestro punto de vista. Lo que me
gusta de la viñeta de prensa es el compromiso que hay detrás del dibujo. Y lo
que más me gusta de Charlie es la libertad. El clima es tenso política y
socialmente, pero eso no nos debe impedir reírnos de todo; incluso de la
muerte.
P. ¿Ha cambiado su modo de trabajar?
R. Mucha gente me dice que he evolucionado. Ahora
sabemos que ya no somos esa pequeña publicación que trabaja en un rincón y que
ni siquiera tenía 30.000 suscriptores. Lo que lamento es que hayamos tenido que
sufrir un acontecimiento tan trágico para que la gente comprendiera lo
importante y necesario que es Charlie para nuestra democracia y nuestra libertad de
expresión. Ahora hay mucha gente que no conocía nuestra revista y la han
descubierto tras el atentado. Intentamos mantener la finura, la ironía y la
sátira, pero desconfiamos de los dobles sentidos.
R. Inevitable volver atrás. Teníamos ya preparado
el siguiente número de la revista y rehicimos todo. Extrañamente, dibujé
fácilmente, como si tuviera algo en común con lo que acababa de ocurrir. Hice
un monigote, un parisino que se divertía que podría haber sido cualquiera de
nosotros. Era una resistencia consistente en divertirse, ir a conciertos,
vivir, dibujar y hacer música.
P. Ustedes han recibido 10.000 dibujos durante
este tiempo. ¿Quiénes los han enviado? ¿Cuáles le han impresionado más?
R. Nos los han enviado desde un niño de tres años
hasta una señora de 90. Hemos leído cada carta. Ha sido un trabajo enorme.
Todavía hoy recibimos dibujos de apoyo. Para valorarlos se ha creado la
asociación Dibuja, Crea, Libertad. Se han seleccionado 145 para el libro Yo dibujo, que se publica el 7 de
enero. Son 145 viñetas en torno a la libertad de expresión y la mixtura. 145
dibujos que plantean preguntas también. Hay algunos que son racistas, hay que
decirlo. No podemos negar que hay niños de ocho años que hacen dibujos muy duros
contra los musulmanes. Hay que hablarlo porque algunos lo hacen sin saber.
R. Luz tenía ya 23 años de experiencia en el
dibujo de prensa. He recibido un gran golpe porque era muy colega de Charb. No
cierra la puerta al dibujo porque también le ha salvado la vida. El dibujo nos
ha salvado a todos, creo yo.
P. ¿Tienen ahora dificultades para encontrar
nuevos dibujantes?
R. Llamamos a Vuillemin, un antiguo de la primera
época deCharlie. Está también Dilem, un dibujante argelino muy
comprometido. Es muy difícil encontrar dibujantes para Charlieporque tiene un grafismo muy
específico. La viñeta de prensa tiene que ser sintética, impactante y vehicular
ideas fuertes. Hay que ser cáustico. Y la línea de la revista es muy exigente.
P. Hay muchos que reivindican el derecho a la
blasfemia. ¿Se reconoce en esa militancia?
R. Personalmente, yo no blasfemo gratuitamente. Charlie Hebdo es una revista de actualidad. Sus autores se
guían por esa actualidad. Dibujar al profeta por el placer de hacerlo nunca ha
sido Charlie. De hecho, lo hemos dibujado mucho, pero mucho
menos que a Jesús, por ejemplo. Solo se trata la blasfemia si es necesaria, si
está justificada.
P. Se ha publicado que hay problemas internos en
la revista por el dinero.
R. Es obvio que hay disensiones en cierto
momento. Fueron seis meses muy difíciles. Hay gente que quería que la revista
fuera en un sentido y otros como yo que creíamos que todo debía seguir como
antes. Finalmente, todo se ha llevado por el buen camino, con lucidez y mesura.
La nuestra no es la vida normal de una empresa. ¿Es que no habría habido las
mismas tensiones en cualquier periódico, incluido el suyo, cuando hay muerte,
tristeza, conmoción, duelo y cólera?
P. En enero todo el mundo fue muy solidario, pero
eso ha cambiado mucho.
R. Creo que la gente que decía que Charlie se lo había buscado ha debido darse cuenta de
su tontería. No es solo la libertad de expresión, sino la libertad simplemente
la que ha sido atacada. La libertad de ir a un concierto, de tomar una copa. Ha
habido una toma de conciencia distinta. Me ha escandalizado constatar que hay
gente que transformaba a las víctimas en culpables. Emmanuel Todd se hizo una
paja mental con argumentos sociológicos nada serios. ¿Es que no se podía ver el
11 de enero como una bonita
manifestación de apoyo y emoción? ¿De apoyo hacia periodistas,
dibujantes, policías y judíos que fueron el objetivo de esos monstruos
fanáticos?
P. El álbum del año, una tradición para Charlie, no será como ningún otro…
R. Imposible no decir que no veremos más dibujos
de algunos. Hay viñetas con las cuales tengo una emoción particular porque he
visto hacerlas. Está toda la inteligencia de Charb en el dibujo que dice “¿Y
ahora pobre idiota?” con todas las cabezas cortadas y apiladas del ISIS. Está
el trazo fluido y las soberbias acuarelas de Tignous. Sin olvidar los dibujos
de culos de Wolinski. De Cabu, pienso en ese dibujo sobre los migrantes en una
barca con Marine Le Pen y Nicolas Sarkozy agujereada con un sacacorchos. Está
la gracia, la poesía del dibujo de Honoré, que muestra a Al Baghdadi deseando
el año nuevo con esta palabra: “Y sobre todo la salud” (apareció en el Charlie Hebdo del 7 de enero del año pasado). En un contexto
tan duro, es increíble ver que la revista sale cada semana y que se publica
este álbum. Somos fieles a lo que somos y a lo que éramos.
Thursday, January 07, 2016
Libertad con Humor, un homenaje a los caricaturistas asesinados en Charlie Hebdo
Este 7 de enero, al
conmemorarse el primer aniversario del atentado criminal yihadista contra los
integrantes de la revista satírica francesa Charlie Hebdo, el Museo Nacional da
Imprensa, inaugura simultáneamente en Lisboa y Oporto, dos exposiciones
con más de cien dibujos de humor de autores de los cinco continentes y decenas
de publicaciones, que evocan los valores de la libertad de expresión y de
prensa. Libertad con Humor es el título de ambas muestras, cuyos
diseños resultan de una selección de varias ediciones del PortoCartoon World
Festival, evento que, dirigido por Luis Humberto Marcos, se realiza en la
ciudad portuguesa de Oporto, y que cuenta con el apoyo de las más prestigiosas
figuras del humor gráfico.
Las
exposiciones, además de las caricaturas, presentan también periódicos y
revistas portugueses y extranjeros, que hace un año reflejaron la indignación
mundial por la masacre en el magazine satírico francés. De entre las
publicaciones se destacan: Paris Match, Libération, Le Monde, New
York Times, Wall Street Journal, The Economist, The Daily Telegraph, Welt am
Sontag, Der Spiegel, Time, El País, El Mundo, Jornal de Notícias, Público,
Diário de Notícias, Le Canard Enchainé, Nouvel Observateur, Marianne, Le
Figaro, Courrier International, France Dimanche, Corriere della Sera y el propio Charlie Hebdo, entre otros.
“Ahora
–dice Luis Humberto- la evocación de aquel día sangriento , debe servir para
decir más alto el grito de Libertad, como un valor indispensable de la vida,
como la respiración misma. Por eso hemos hecho esta propuesta para crear una
onda universal, que defienda los derechos de libre expresión y el trabajo de
los periodistas y caricaturistas, tan necesarios en el desarrollo de la sociedad,
y que cada día enfrentan innumerables dificultades de todo tipo para realizar
sus trabajos. Estas muestras serán una prueba de la fuerza de la libertad
y de la afirmación de los valores de la crítica y del arte contenidos en la
caricatura”.
“También
es un homenaje –añade Luis Humberto- a Georges Wolinski, periodista y
caricaturista francés asesinado ese día, quien fuera presidente del Jurado del
PortoCartoon de 2004 al 20014 y que siempre recordaremos con mucho cariño. En
su memoria, el Museu Nacional da Imprensa lanza este día 7 la Galería Wolinski,
un nuevo espacio virtual que mostrará fotografías, sus diseños, crónicas,
portadas de su autoría en Charlie
Hebdo, biblografía y otros contenidos que podrán ser vistos enhttp://www.cartoonvirtualmuseum.org/
Las
exposiciones “Libertad con Humor” se realizarán en la Casa da Imprensa, en
Lisboa, hasta el 15 de marzo, y en el Museu Nacional da Imprensa, en
Oporto, hasta el 30 de abril. El Ministro de Cultura João Soares presidirá el
acto de inauguración en la capital portuguesa, en el que también estará
presente el embajador de Francia en Portugal, Jean-François Blarel.
Vladimir Kazanebsky
Yayo
Wednesday, January 06, 2016
Estúpidos, Maldosos e Semanais. Uma constelação em torno do Charlie Hebdo - Exposição na BEDETECA da Amadora
Estúpidos, Maldosos e Semanais. Uma constelação em torno do Charlie Hebdo
No dia 7 de janeiro, 1 ano após o atentado contra o Charlie Hebdo, a Bedeteca da Amadora inaugura a
exposição “Estúpidos, Maldosos e Semanais. Uma
constelação em torno do Charlie
Hebdo”, a qual estará patente até ao dia 30 de janeiro.
Integrada no programa “Os Cinco Sentidos da Banda
Desenhada”, conta com a curadoria de Pedro Moura, desta feita com a
colaboração de Osvaldo Macedo de Sousa. Trata-se de uma exposição documental dedicada
ao Charlie Hebdo e à
constelação de publicações e autores ligados ao mesmo, acompanhada de uma
mostra de artistas do mundo árabe que têm
sofrido em nome da liberdade de expressão… Parte das publicações foram
gentilmente emprestadas pelos Serviços da Bedeteca da Biblioteca Municipal dos
Olivais.
No próprio dia 7, pelas 20h00, tem lugar uma mesa-redonda
de artistas do cartoon editorial, estando já confirmadas as
presenças de Nuno Saraiva e Rui Pimentel.
Integrado neste evento, realiza-se no dia 23 de janeiro outra
sessão de debate, desta vez no Museu Bordalo Pinheiro, em Lisboa, de modo a se assinalar
a data da morte do nosso “Pai dos quadradinhos”…